
No hay nada que reconforte más en estos días de otoño que una lasaña calentita y cremosa. Existen mil variaciones de las lasañas y yo he creado la mía, basándome en lo que más me ha gustado de todas las recetas que he aprendido. En este caso he hecho una lasaña vegana de champiñones y soja texturizada, con bechamel simple y pasta de espelta. Obviamente podemos hacer esta receta libre de gluten simplemente cambiando la pasta y sustituyéndola por pasta de lasaña sin gluten (hay varias marcas que hacen placas de maíz o arroz integral por ejemplo).
En mi boda hace ya casi dos semanas (cómo pasa el tiempo…) servimos lasaña vegana como plato principal y tuvo mucho éxito, asi que al volver me animé a crear esta versión personal. Es muy sabrosa y la verdad es que, todo sea dicho, es difícil no repetir. Las capas de champiñones, con bechamel cremosa, la soja texturizada sabrosa y la combinación de sabores y especias la hace perfecta para cualquier ocasión, tanto cenas para dos como cenas con grupos de amigos (veganos y omnívoros quedarán encantados, te lo aseguro!).
Aquí te dejo mi versión particular de la lasaña vegana, espero que te guste!


- Placas para lasaña (yo utilicé 9 placas de 16 x 8 cm para una bandeja de 28 x 19 cm) de espelta o sin gluten
- 300 gr de champiñones (yo utilizo champiñones castaña)
- 100 gr de soja texturizada
- 300 ml de agua caliente
- 1 cda de aceite de sésamo
- Cebolla y ajo en polvo
- Pimentón picante y pimienta de cayena
- Salsa de soja, tamari o aminos
- Vinagre de manzana o de arroz
- Orégano
- Humo líquido (opcional)
- 1 diente de ajo
- El zumo de medio limón
- Perejil picado
- 600 ml de leche de soja o almendra sin endulzar
- 1 cda de aceite (de oliva o de girasol)
- 50 gr approx. de harina sin gluten (yo utilizo harina de arroz integral)
- Nuez moscada
- Sal y pimienta
- Levadura nutricional (opcional pero muy recomendada)
- Queso vegano rallado (yo utilicé Violife Cheddar)
- Precalentamos el horno a 180 C.
- En un cuenco grande ponemos las placas de lasaña y las cubrimos con agua hirviendo y las dejamos reposar 5 minutos moviéndolas de vez en cuando para que no se peguen entre ellas.
- Mientras tanto troceamos los champiñones en láminas, y los ponemos a rehogar en una sartén con un poco de aceite y un diente de ajo a fuego medio.
- Mientras los champiñones se doran, preparamos la soja texturizada: en un cuenco mezclamos la soja texturizada con ajo en polvo, cebolla en polvo, pimentón, cayena, sal y pimienta al gusto.
- Añadimos el agua, el aceite de sésamo y la salsa de soja (y humo líquido si lo deseamos) y removemos bien; la dejamos reposar mientras seguimos con el resto de cosas, para que absorba el agua y las especias.
- Añadimos el perejil picado y el zumo de medio limón a los champiñones y rehogamos hasta que estén un poco dorados. Retiramos del fuego.
- En una sartén (yo utilizo la misma de los champiñones) ponemos la harina con la cucharada de aceite y mezclamos bien.
- Vamos añadiendo la leche poco a poco asegurándonos de que no quedan grumos (yo utilizo una varilla).
- Cuando hayamos añadido toda la leche, salpimentamos y echamos la nuez moscada al gusto.
- Cuando la bechamel ya haya espesado lo suficiente la retiramos del fuego.
- Empezamos a montar la lasaña: Ponemos un par de cucharadas de bechamel en la bandeja como base para la lasaña.
- Secamos las placas de lasaña con papel de cocina y vamos colocándolas de forma que cubran toda la base (a mí me caben tres en horizontal en la bandeja que he comentado arriba).
- Añadimos una capa de champiñones, otra de soja texturizada y otra de bechamel, y terminamos con levadura nutricional.
- Cubrimos con otra capa de placas de lasaña y repetimos con los champiñones, la soja y la bechamel (y levadura nutricional).
- Terminamos con otra capa de placas de lasaña, y la cubrimos con la bechamel que nos ha sobrado y un poco de queso rallado.
- Cocinamos durante unos 30 minutos en el horno, y después unos 10 minutos más solo con el grill del horno para que la capa de queso se nos funda y tueste un poco más.

Como veis hacer una lasaña no tiene ningún secreto y es bastante sencillo. Esta lasaña vegana es sabrosísima y aunque es casi imposible no comérsela toda en una sola comida, se congela muy bien y se puede conservar en la nevera un par de días.
Además es bastante ligera en lo que grasa se refiere (sobre todo si la comparamos con una lasaña tradicional con carne, leche y mantequilla). Utilizar la soja texturizada no es obligatorio y se puede sustituir simplemente por más champiñones, aunque se perderá parte de la textura que hace a esta lasaña tan irresistible (y no, dejemos de demonizar a la soja por favor, os prometo que no pasa nada por tomarla en moderación y de buena calidad).
Este plato es un triunfo asegurado para cualquier cena con amigos pero sobre todo para los domingos; en mi casa estoy intentando instaurar oficialmente los domingos de lasaña vegana!
Espero que la probéis y que os encante como a mí y mi sueco 🙂
xx
Rocio
Al y, que soja texturizada recomiendas? Yo la compro organica a granel en una tienda ecológica pero no sé la marca. Si tú sabes de alguna de alta calidad te agradezco la información. Un saludo y enhorabuena por tus éxitos.
Ally
RocioHola guapa! Yo no como mucha asi que cuando la quiero compro cualquiera que me pille a mano, si puede ser orgánica mejor 🙂 Un besazo xx
rocio
AllyGracias!! Yo como muy de vez en cuando, no soy muy amiga de incluir la soja como base de mi alimentación.