
Enero es el año de los buenos propósitos y nuevos intentos de dejar de fumar y discutir menos con tu cuñado. Ese mes tan mágico en el que estrenamos calcetines, bragas, y unas nuevas ganas de comernos el mundo (porque el turrón y los polvorones ya nos los hemos comidos todos).
La cuestión es, que desde 2014 existe una iniciativa que nos anima a comer de forma 100% vegetal durante el mes de enero, y así contribuir a nuestra salud, el medioambiente y los animales. En esta iniciativa llamada Veganuary se apuntan cientos y miles de personas cada año, y es una auténtica maravilla ver cómo tantas personas se unen por una misma causa con tantas ganas. Recuerdo la primera vez que yo misma participé en esta iniciativa cuando vivía en Londres, y cómo todos los restaurantes modificaban su carta durante este mes para dar opciones a las personas que participaban en el reto.
El reto de Veganuary me inspiró a crear un reto para nuestra comunidad: Veganero. Desde que lancé este reto muchísima gente se ha unido a la aventura y se ha creado una comunidad increíble alrededor de la iniciativa. Muchas de estas personas siguen adelante con la dieta 100% vegetal más allá del mes de enero, y una de las preguntas que más recibo es: «Y ahora, ¿cómo sigo?».
Así que, aquí te dejo los 5 consejos para continuar tu camino en el veganismo.
Aléjate de las etiquetas (al menos al principio).
Desde mi humilde opinión, la palabra «veganismo» es una de las más bellas que existen, y entiendo perfectamente que nos llene de orgullo definir parte de lo que somos con ella. Sin embargo, cuando realizamos un cambio así en nuestra vida, lo mejor para nuestra salud mental es no etiquetarnos desde un principio. Es una presión extra que realmente no es necesaria. Además, si en nuestro entorno no existen personas veganas, es posible que por miedo, ignorancia o prejuicios sobre la comunidad vegana, nos pongan el camino más difícil mediante comentarios y discusiones totalmente inútiles. No te etiquetes, simplemente ten presente que eres una persona en el camino hacia una vida libre de explotación animal en todos los sentidos. Esto te dará la oportunidad de hacer el cambio de forma más relajada, sostenible y tranquila, y permitirte cometer errores, porque lo harás.
Que los pequeños errores no te desmotiven
Y siguiendo con los errores, puedo decirte que incluso las personas veganas que llevan décadas siéndolo, cometen errores o consumen algo de origen animal sin darse cuenta, ya sea por algún error de comunicación en un restaurante, por descuido o incluso porque hayan reformulado algún producto que siempre había sido vegano. Todas somos personas y como personas cometemos errores, simplemente debemos aprender de ellos y seguir adelante.
Sigue a gente vegana en redes y haz piña
No hay nada más poderoso que el amor por una causa común. Sigue a personas veganas en redes (en Veganero te damos a conocer algunas de las más influyentes), pero sobre todo, que compartan contenido que tenga que ver con los animales, la liberación animal o el especismo. Ahí es donde encontrarás a tu tribu. El contenido de cuentas que hablan del veganismo desde el punto de vista de la dieta, puede cambiar tan rápido como las Kardashian cambian de la dieta Atkins a la dieta del sirope de arce, y eso no es lo que necesitas si realmente quieres mantener este estilo de vida a largo plazo.
No te compares y acepta tu proceso
Es importante que sepas que no hay una sola forma de dar o mantener el paso al veganismo. Hay personas, como yo, que prefieren hacer las cosas de golpe (porque somos así, intensas de la vida), y otras, como muchas personas de mi entorno, que decidieron hacerlo todo poco a poco y eliminar productos uno a uno. Lo importante es que sea algo sostenible para ti, no te compares con los demás porque eres única y solo tú sabes lo que mejor te funciona. Y si alguien te dice que tienes que hacerlo como ellas creen, mándale a freír espárragos, que son veganos.
Recuerda que estás en el buen lado de la historia
Quizás llegue un momento en el que veamos el consumo de productos animales como algo que solo pertenece al pasado, quizás lo veamos como algo barbárico que hacíamos y que ya no es aceptable ni ético. Ojalá llegue ese día. Pero hasta entonces, debemos aceptar que vivimos en un mundo que no es vegano, y que muchas veces, el sistema gana. Acepta que hay cosas que no podemos cambiar de la noche a la mañana y que hay veces en las que sentirás que lo que haces, no sirve de nada. Olvídate de eso porque lo que haces, SIRVE, y MUCHO. Piensa que cada vez que en una comida o compra no implicas a ningún animal, estás salvando su vida.
Lo más importante es que tengas tus motivos para hacerlo y para seguir adelante. Piensa también que, llevando un estilo de vida libre de productos animales, puedes reducir tu impacto medioambiental hasta en un 73%. Además, todos los estudios (al menos aquellos que no están fundados por la industria cárnica) confirman que las personas que llevan una dieta 100% vegetal viven más y mejor.
Lo mires por donde lo mires, el veganismo solo trae cosas buenas, y no existe ningún argumento real contra el movimiento. Por eso, recuerda que dando este paso, estás en el buen lado de la historia, y lo sentirás cada vez que a partir de ahora, mires a un animal a los ojos.
Bienvenida al lado brillante.