Hace unas semanas os enseñé mis nuevas braguitas de Cocoro Intim y muchas de vosotras me pedisteis que os hablara de ellas, ya que queréis uniros a la menstruación sostenible. Cocoro Intim me hizo llegar la braguita «clásica», que es una forma de braguita «de toda la vida», y después de probarla durante tres ciclos (ya que quería probarla en situaciones diferentes) puedo hablaros de las diferentes impresiones que he tenido a lo largo de este tiempo.
Antes de nada dejar un par de cosas claras. Las mujeres (algunas) tenemos menstruación. No pasa nada. Ni es nada malo, ni asqueroso, ni tabú. La naturaleza nos hizo así. VIVA LA REGLA. VIVA LAS PERSONAS CON O SIN REGLA.
Por otra parte, explicar qué son las braguitas menstruales. Son básicamente unas braguitas que actúan como compresas. Es decir, tienen una tela especial que las hace absorber el flujo menstrual, de forma que no traspasen las braguitas y manchen la ropa. AQUÍ podéis ver de qué están hechas.
Yo personalmente utilizo la copa menstrual durante los días más fuertes de la menstruación, durante los días medios me gusta utilizar estas braguitas y por la noche prefiero usar compresas reutilizables, aunque si tuviera más braguitas como estas de Cocoro Intim probablemente también las usaría para dormir, sobre todo con las altas de cintura, que parece que tienen que ser como un gran abrazo a tu tripa los días que tienes molestia (aparte de que el look de cualquier cosa alta de cintura, me encanta). Un poco de todo, como podéis ver. AQUÍ podéis ver todo sobre las copas menstruales para aquellas que estéis interesadas.
Respecto a las braguitas, tengo que decir que me resultan extremadamente cómodas, y por simple experimento, las he usado durante los días fuertes, y no he tenido ningún problema, incluso llevándolo al límite y llevándolas más tiempo de lo normal para probar si calaban, jamás lo hicieron. Las he utilizado para hacer yoga, para correr y para ir al gimnasio y no he tenido ningún percance, aunque los días de menos regla (en los que solo manchas levemente) daba gusto llevarlas todo el día y olvidarte. Una cosa que me llamó la atención es que comparando la sensación con la que recuerdo de las compresas «de siempre», no sientes humedad en absoluto. Y olvidaros de que se sientan «como un pañal». De verdad, se siente como ropa interior normal.
Respecto a la comodidad, he de decir que el único pequeño inconveniente que les veo, es que en mi caso, las clásicas me quedan un poco cortas por detrás, es decir, al ras del culete. Por lo demás, tengo que decir que entre lo suaves que son y lo cómoda que es la tela, te olvidas de que son braguitas menstruales.
Para lavarlas no he tenido tampoco ningún inconveniente, las lavo junto con la ropa interior normal en una redecilla de lavado. En nuestro caso, como no utilizamos suavizante y lavamos la ropa con detergente casero o nueces de lavado, no hay problema, pero es importante no usar suavizante y lavarlas a un máximo de 30 grados. Jamás me han salido con manchas o mal lavadas.
Con este tipo de productos, estaremos reduciendo nuestro impacto ambiental considerablemente. En principio pueden utilizarse durante une media de dos años, así que imaginad la de compresas o tampones que ahorraremos (se amortizan muchísimo económicamente). Pero esperad, que ahora viene lo más fuerte. Cada compresa clásica tarda 500 AÑOS en descomponerse.
500 AÑOS
Cuando leí este dato me quedé con al boca abierta, porque teniendo en cuenta la cantidad de compresas que utilizamos cada mes, y multiplicándolo por las mujeres que hay en el mundo con acceso a estos productos… no me salen las cuentas de espacio en el planeta para tanta basura. Lo mismo pasa con los pañales, por cierto. Y nos os dejéis engañar por los «biodegradables» porque para que esto ocurra se tienen que dar condiciones específicas que muchas veces no ocurren. Desde mi punto de vista esta (y cualquier producto de menstruación reutilizable) son inversión es necesaria, y si podemos ahorrar crear esta cantidad surrealista de residuo, y además sentirnos más cómodas, mejor que mejor. Para mí son una necesidad y después de probarlas estos meses he decidido que necesito las de cintura alta para los días en los que quieres setirte «recogidita». Después de todo llevo pantalones «sobaqueros» muy a menudo, así que me pegan con el look también.
Muchas gracias a Cocoro Intim porque además de hacerme llegar estas braguitas (que yo les pedí para poder realizar la reseña en la web ya que me lo pedisteis muchísimo) nos han proporcionado un código de descuento:
- Código 10% descuento: ALLY_COCORO
- Condiciones: Descuento del 10% al usar el código ALLY_COCORO. Solo para clientes registrados. Oferta válida hasta el 30/06/2018.
Podéis comprarlas aquí: https://goo.gl/fpRj4S
Decir que anteriormente había probado otras braguitas menstruales de una marca americana, pero cuando es posible obviamente me gusta intentar optar por empresas nacionales y además lideradas por mujeres (que podéis ver AQUÍ lo bonicas que son), así que todo son cosas positivas 🙂
Espero que os haya gustado y si tenéis cualquier duda podéis dejarla en comentarios como siempre.
¡Feliz semana bellas!
Hola Ally! Me alegro que te hayan gustado, yo las conocí por Facebook cuando estaban en plena campaña para conseguir los fondos para poner en marcha su proyecto y me parecieron un inventazo. (Soy la chica que las sugerí en el directo de instagram hace unos meses ya ?)
Ahora quiero pedirme unas thinx pero el Tanga para esos días que tengo poco flujo.
Un abrazo y gracias por compartir tu experiencia. Viva la #sectadelashierbas ?.
Llevaba tiempo pensándolo porque uso la copa y me faltaba algo más.
Esta semana mismo hago el pedido con dos amigas más.
Los terribles datos sobre lo que tardan algunos residuos en “desaparecer”son eso,terribles.
Ojalá se animen muchas a la menstruación sostenible.